Papantla.-- De arraigo ideológico, de convicción partidista, la verdad y dicho como lo dice el pueblo, contados son los ciudadanos que lo mantienen sea cual fuere el Partido al que pertenecen. Los políticos han prostituido o desanimado al electorado y éste a la hora de acudir a las urnas, lo hace para ejercer su preferencia, corresponder o vota en contra de las indicaciones simplemente. Hay quienes no sufragan. La política se prostituyó y no hay credibilidad en los actores políticos con mando de dirigentes porque cayeron en comercio descarado y hoy una corriente es llevada del PRD al PAN; del PAN al PRD; del PRI al PAN; Del PAN al PRI o a Convergencia. Esos movimientos nada tienen que ver con la convicción o el derecho a cambiar de siglas y colores, no por decepción ideológica sino por conveniencia. Los dirigentes encontraron ya su modus vivendi en la política, negociando sin recato y respeto al Partido al que pertenecen. De seis años a la fecha los políticos con poder se quitaron la máscara de la democracia y se pusieron la de Judas para recibir las monedas de la traición. La línea ideológica que dividía al PRI, PAN y PRD y demás Partidos de izquierda y derecha se perdió para dar paso a la alianza para la transa. Arriba Chucho Ortega entregando parte del sol azteca al PAN: o panistas al PRI como se vio en Veracruz en la contienda pasada y como se está viendo en los procesos recientes en entidades del país…
La lealtad partidista comenzó a perderse de arriba abajo. Iniciaron los mandos mayores y les siguieron los menores llegando la corrupción hasta la militancia, con sus contadas excepciones que por serlo, se van perdiendo en los pantanos de la traición, desde el nivel nacional hasta los niveles municipales, pasando por los estatales. En Papantla y para no ir lejos, fue descarado y denigrante ver el paso de mandos e influyentes perredistas a favor del PRI en las pasadas elecciones, donde también se dio el brinco de panistas al “tricolor”. Todo mediante su correspondiente “pago de favores” en efectivo, plazas para maestros o placas para taxis. La derecha, izquierda y centro-izquierda bailando la danza de la corrupción abierta, descaradamente…y con el cinismo de no renunciar al Partido al que pertenecen y siguen ahí, listo para volver a comerciar en los procesos que vienen. Como es en Papantla y en varios municipios del país, como lo será quien sabe hasta cuándo…
Esta generación de políticos está dando el jaque mate a las ideologías partidistas. Ya no hay convicciones sino traiciones, negociaciones, simulaciones y ambiciones. Estamos viviendo el ocaso de la democracia y ante esa situación lamentable y criticable emerge la opción de poner en activo las candidaturas ciudadanos. Abanderados que surjan de corrientes sin mas siglas y colores que los de la sociedad civil. Papantla y en 70 municipios más de la entidad veracruzana donde perdió el PRI, ya vivió esa importante experiencia cuando gobernaba el Estado Rafael Hernández Ochoa quien al ver los resultados dio marcha atrás y volvieron las elecciones con Partidos registrados nacionalmente. Aquí gobernó por mandato social el hoy finado ingeniero Arturo Tremari Blanno y su administración fue transparente y de resultados positivos para la sociedad papanteca, urbana y rural. Hoy eso es historia con voces que nacional y estatalmente quiere la sociedad civil que vuelva y se quede para siempre, con candidaturas ciudadanas ante el fracaso y corrupción de las que son impulsadas por dirigentes partidistas que cargando a dirigentes que no lideres deshonestos, se venden al mejor postor y traicionan a su Partido y sobre todo, a la sociedad…Es todo, por hoy.
La lealtad partidista comenzó a perderse de arriba abajo. Iniciaron los mandos mayores y les siguieron los menores llegando la corrupción hasta la militancia, con sus contadas excepciones que por serlo, se van perdiendo en los pantanos de la traición, desde el nivel nacional hasta los niveles municipales, pasando por los estatales. En Papantla y para no ir lejos, fue descarado y denigrante ver el paso de mandos e influyentes perredistas a favor del PRI en las pasadas elecciones, donde también se dio el brinco de panistas al “tricolor”. Todo mediante su correspondiente “pago de favores” en efectivo, plazas para maestros o placas para taxis. La derecha, izquierda y centro-izquierda bailando la danza de la corrupción abierta, descaradamente…y con el cinismo de no renunciar al Partido al que pertenecen y siguen ahí, listo para volver a comerciar en los procesos que vienen. Como es en Papantla y en varios municipios del país, como lo será quien sabe hasta cuándo…
Esta generación de políticos está dando el jaque mate a las ideologías partidistas. Ya no hay convicciones sino traiciones, negociaciones, simulaciones y ambiciones. Estamos viviendo el ocaso de la democracia y ante esa situación lamentable y criticable emerge la opción de poner en activo las candidaturas ciudadanos. Abanderados que surjan de corrientes sin mas siglas y colores que los de la sociedad civil. Papantla y en 70 municipios más de la entidad veracruzana donde perdió el PRI, ya vivió esa importante experiencia cuando gobernaba el Estado Rafael Hernández Ochoa quien al ver los resultados dio marcha atrás y volvieron las elecciones con Partidos registrados nacionalmente. Aquí gobernó por mandato social el hoy finado ingeniero Arturo Tremari Blanno y su administración fue transparente y de resultados positivos para la sociedad papanteca, urbana y rural. Hoy eso es historia con voces que nacional y estatalmente quiere la sociedad civil que vuelva y se quede para siempre, con candidaturas ciudadanas ante el fracaso y corrupción de las que son impulsadas por dirigentes partidistas que cargando a dirigentes que no lideres deshonestos, se venden al mejor postor y traicionan a su Partido y sobre todo, a la sociedad…Es todo, por hoy.